LA ESPERANZA DE VELEZ

Escrito por Martín Martinez

Sin lugar a dudas, Luca Orellano es uno de los jugadores que continua demostrando todas sus condiciones y desde la salida por lesión de Bouzat, es el jugador más determinante en ofensiva para los dirigidos por Mauricio Pellegrino. Con velocidad, gambeta y goles el joven surgido de la cantera velezana se ganó la confianza del técnico para afirmarse en la primera del club, algo que no había podido lograr con Gabriel Heinze técnico que lo hizo debutar la temporada pasada. El joven de tan solo 20 años tiene una gambeta indescifrable y aprovecha a la perfección jugar con el perfil cambiado para enganchar hacia adentro y tener todo el arco de frente para definir como lo hizo con Universidad Católica y con Talleres por ejemplo.

En el principio de su gestión el entrenador de Vélez había optado por darle el puesto a Agustín Bouzat, que no tiene todos los recursos ofensivos que cuenta el extremo de la cantera, pero podía otorgarle un mayor compromiso para el retroceso ayudando al lateral derecho, un puesto donde iban rotando constantemente entre Guidara y De La Fuente. Con el correr de los partidos y debido a los grandes ingresos desde el banco, Orellano fue ganándole la pulseada al bahiense proveniente de Defensa y Justicia, siendo hoy en día un titular indiscutido. Debido a sus grandes rendimientos en este inicio y el aceptable partido dentro del desastre que fue Vélez ante Boca, el extremo zurdo es el mejor jugador del ataque, que cuenta con jugadores en muy bajo nivel como Thiago Almada Lucas Janson y Ricardo Centurión.

Su mano a mano es la amenaza principal del equipo de Pellegrino, que en reiteradas oportunidades buscar volcar todo el juego para un lado y cambiar de frente para que quede Orellano, solo ante el lateral izquierdo, con la posibilidad de desbordar o de enganchar y definir. La buena noticia para los hinchas velezanos, es que la estrella del club, renovó su contrato hasta el 31 de diciembre del 2023, con una clausula de 8 millones de dólares. Sin dudas, poder retener por casi 2 años más a un jugador que podía quedar libre dentro de poco es muy bueno, sin embargo, debido a la muy baja clausula de recisión, más pronto que tarde, el jugador partirá buscando nuevos horizontes.

Por el momento, los hinchas de Vélez debemos disfrutar el presente de una nueva joya del club, que si está bien rodeado puede darle muchísimas alegrías a la institución hasta que decida emigrar.

 

Por Martín Martínez

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